Esta villa es una casa que se siente como si fuera parte del paisaje, mezclándose naturalmente con su entorno.
Diseñada con plataformas de hormigón y pérgolas de madera, la casa sigue la pendiente del terreno, dando forma a los espacios habitables a su alrededor. Se entra a través de un pabellón que se abre a impresionantes vistas panorámicas de la zona.
En el primer nivel de la planta baja, se encuentra el dormitorio principal con vestidor, baño en suite y terraza privada. El siguiente nivel tiene tres amplios dormitorios, cada uno con su propio baño en suite y terraza privada. Las principales áreas de estar se encuentran en el tercer nivel. La sala de estar y el comedor están separados de la cocina, pero las puertas correderas le permiten combinarlos en un gran espacio abierto. En este nivel también tenemos un aseo de invitados. Con cuatro puertas correderas de vidrio que se abren desde la sala de estar al exterior, la casa se siente completamente conectada con la naturaleza.
Abajo, en el sótano, hay una amplia área de entretenimiento, que incluye una sala de juegos, sala de TV, bar, aseo de invitados y un gimnasio. Incluso aquí, la luz natural fluye desde la piscina de arriba, creando un brillo suave y brillante.
Todos los niveles están conectados a través de escaleras internas y externas, o a través del ascensor.
Cada detalle de la casa, desde los materiales de alta calidad hasta la forma en que interactúa con el paisaje, se ha considerado cuidadosamente para crear un espacio cálido y acogedor que se siente uno con la naturaleza.